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Fueron, hace mucho, las románticas proletarias del amor. La noche les
puso nombres con seducción de insulto; paicas, locas, milongas,
percantas, obreras. Era frecuente verlas al alba desayunando un
chocolate con churros en la confitería Vesubio de la calle Corrientes.
Salían de trabajar a esa hora del «Chantecler», del «Marabú», del «Tibidabo».
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Con un arranque loco de Madame Bovary de Barracas al Sur, se jugaron la vida en los tangos.
Alguna se enamoró de aquel bandoneonista y por amor, ganó.
Para otras la derrota fue mucha, terminaron atendiendo los guardarropas
de damas de esos mismos cabarets.
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Acaso se fueron todas juntas un día, como si fueran una pequeña y extinguida raza con ojeras.
Este tango relata la última de las grelas, descubre su definitivo paso fantasmal,
sobre el asfalto recién amanecido de una Buenos Aires espectral, y lo cuenta así:
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Cantado
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FAm DO# RE#
Del fondo de las cosas y envuelta en una estola de frío,
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con el gesto de quien se ha muerto mucho,
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vendrá la última grela, fatal, canyengue y sola,
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taqueando entre la pampa tiniebla de los puchos.
FAm FAm7/RE#
Con vino y pan del tango tristísimo que Arolas
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callara junto al barro cansado de su frente,
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le harán su misa rea los fueyes y las violas,
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zapando a la sordina, tan misteriosamente.
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LA#m RE#7 SOL#
Despedirán su hastío, su tos, su melodrama,
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las pálidas rubionas de un cuento de Tuñón,
LA#m RE#7 SOL#
y atrás de los portales sin sueño, las madamas
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de trágicas melenas dirán su extremaunción.
LA#m RE#7 SOL#
Y un sordo carraspeo de esplín y de macanas,
DO# LA#m DO7 FAm
tangueándole en el alma le quemará la voz,
LA#m RE#7 SOL#
y muda y de rodillas se venderá sin ganas,
DO# DO7 FAm
sin vida y por dos pesos, a la bondad de Dios.
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LA#m RE#7 SOL# DO# LA#m DO7 FAm
Qué sola irá la grela, tan última y tan rara,
LA#m RE#7 SOL#
sus grandes ojos tristes trampeados por la suerte,
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serán sobre el tapete raído de su cara,
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los dos fúnebres ases cargados de la muerte.
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LA#m RE#7 SOL#
Despedirán su hastío, su tos, su melodrama,
DO# LA#m DO7 FAm
las pálidas rubionas de un cuento de Tuñón,
LA#m RE#7 SOL#
y atrás de los portales sin sueño, las madamas
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de trágicas melenas
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dirán su extremaunción.